Este es el recurso que hemos dispuesto para empezar a cocrear un catálogo de recursos y propuestas sobre el (auto)cuidado…
Cuidar es generar vínculos, reconocer emociones, administrar disponibilidades, fijar límites, valorar los tiempos, aliviar el dolor, deshacer incertidumbres, acompañar en silencio, enseñar a leer, aprender a bailar, decir no y decir sí, llorar sin tapujos, reír en las madrugadas, tejer afectos, hablarse con ternura, desaprender lastres, aprender a aprender, agradecer y agradarse.
A cuidar(nos) se aprende y es necesario integrar el autocuidado como acto de generosidad con una determinación irrenunciable.
Muestra de ello fue el encuentro del lunes 20, el emocafé de las artes del cuidado en Mazagón. Cuántos aprendizajes trenzados con la generosidad de quienes sabemos que juntas somos más creativas. Juntas nuestras vulnerabilidades se pueden convertir en fortalezas. Juntas podemos trazar horizontes de confianza y ayuda mutua. Juntas podemos aprender los secretos y las técnicas del (auto)cuidado.
Gracias a todas las magas que nos acompañasteis. Gracias a las que manifestasteis vuestro deseo de compartir, vuestra voluntad de cocrear, pero que la distancia o los imprevistos no lo hicieron posible.
Mi recurso para el autocuidado es la risa… reír(nos) es un acto terapéutico que hay que recuperar… Nos masajea el cuerpo, la mente y el corazón. Nos pone en contacto con la niña que fuimos, con los juegos con los que aprendimos, con el amor y la alegría.
Un abrazo musas queridas…